CCI reunió a destacadas líderes en ciberseguridad para debatir cómo facilitar la incorporación de la mujer a la profesión

27/06/2017

El Centro de Ciberseguridad Industrial (CCI) reunió el pasado 27 de junio a un destacado grupo de profesionales y directivas del sector de la Ciberseguridad, entre ellas altas directivas, con el objetivo de identificar barreras y plantear iniciativas que permitan impulsar la incorporación de la mujer a esta profesión. En el transcurso de la reunión surgieron interesantes propuestas.

Según el director de CCI, José Valiente«la intención era tomar buena nota de sus propuestas para poner nuestro granito de arena y apoyar también sus iniciativas». Valiente destacó que a nivel mundial sólo un 30% de trabajadores TIC son mujeres y que las principales barreras para su incorporación a este sector son los estereotipos de género, la discriminación salarial, la falta de conciliación familiar y la carencia de políticas laborales adecuadas.

Participaron en la reunión Elena Matilla, responsable de la gestión y gobierno de la ciberseguridad en Red Eléctrica de España; Amor Domínguez, Business Development for the Spanish market en TÜV Informationstechnik GmbH (TÜViT); Susana Rodrigo, Digital Transformation & Cybersecurity Sales Manager en Grupo Álava; Isabel Bellot, Dirección IT interim / Transformación Digital / 3D printing – AM Fabricación Aditiva / Ciberseguridad; Ana María Gonzalez, IT Security Consultant – ITIL CISA; Juana Higuera, Instrumentation and Systems Engineer en Initec Plantas Industriales/ Grupo Técnicas Reunidas; Belen Pérez, Network and Cybersecurity Engineer en BALIDEA, y Susana Asensio, Miembro de la Junta Directiva de CCI. Todas ellas mujeres tenaces, que han sabido superar las dificultades para seguir dedicándose a su pasión: la tecnología.

Se contaron diversas anécdotas sobre qué sucede cuando se presenta una mujer a hacer un trabajo técnico o un peritaje en una empresa. «Te dicen: ¿tú eres la que vienes a hacer el trabajo? ¿No traes a nadie? Espera que te ayudamos», explicó una de ellas. «Y no saben cómo llamarte, si ‘la perita’, ‘la informática’…», se rió otra. Añadió una tercera: «Un problema para ellos es que si ponen a una mujer como directiva técnica en el comité de dirección tendrán que cambiar el diálogo que hasta ahora era solo para hombres».

Las invitadas de CCI coincidieron en que los estereotipos son una gran barrera ante el hecho de que se vea, como algo normal, que una mujer trabaje en Ciberseguridad. Y destacaron, reiteradamente, la necesidad de la «normalización» del papel que juegan: que no se las vea como «un bicho raro«.

Entre las propuestas aportadas destacó la idea de una mayor participación de las mujeres en foros (profesionales, universitarios u otros), de modo que ello les permita «servir de modelo para las que vienen detrás» y terminar con el desconocimiento que tienen esas nuevas generaciones  –«si no conoces las cosas, es difícil que te puedan gustar»-. Coincidieron, además, en que «a las chicas las motiva que vaya una chica a hablarles de tecnología».

Ahora bien, las contertulias afirmaron unánimemente que dar visibilidad a las mujeres no puede basarse en la discriminación positiva. Una de las invitadas aseveró: «Cuando te planteas qué ponente es el más adecuado para dar una charla y, ante dos candidatos con idénticas cualidades, facilitas que sea la mujer quien la imparta, no estamos ante un caso de discriminación positiva. Simplemente estás contribuyendo a que la audiencia se acostumbre a que haya mujeres».

En resumen, concluyeron las invitadas, lo más importante es «convencer a las nuevas generaciones de que esto es divertido y apasionante; conseguir que lo vean como algo normal, y romper los estereotipos».

Otras noticias de interés Related news